Hola de nuevo a todos los lectores y visitantes de evatelleva.
Estoy aquí de nuevo para comentar, gastronómicamente, mi experiencia en la gran manzana. Espero que me recordéis, soy la que viajó a Berlín con unos amigos y un novio, compró, comió, bebió, y vio un campo de concentración. Bien, yo soy esa, como diría la Pantoja.
En esta ocasión, como bien acabo de explicar, viajé a New York, y el novio que vino conmigo a Berlin, se convirtió en marido, y juntos volamos a Estados Unidos para disfrutar de nuestra Honey Moon.
Nueva York, se puede describir en una sola frase, es de película. Así que dicho esto, os contaré con más detalle nuestros almuerzos, cenas, comidas, meriendas, segundas meriendas…
Empezaré dando tres notas informativas que servirán de ayuda:
- no teníamos desayuno incluido en el hotel.
- mi marido y yo llevábamos más de tres meses a dieta.
- los americanos son muy bestias en todo, y por supuesto en la comida.
DESAYUNOS Y/O ALMUERZOS.
Para desayunar en New York tienes varias opciones, yo tuve que pasar por todas a la fuerza.
- La primera es un puesto ambulante donde te venderán café, caffe-latte(café con leche), hot chocolate, etc, muy caliente, y puedes pillar algún donut glaseado de chocolate u otro sabor. Esto lo probamos el primer día. En plena 5ª avenida, quisimos imitar a los neoyorquinos e ir con el café por la calle.
Ese fue mi primer error, no sé beber mientras camino, me abrasé la lengua unas 6 veces y no se puede disfrutar de un donut caminando a toda pastilla y chocándote con la gente. No!! Por eso tenemos la segunda opción.
- Starbucks (hay alrededor de 350 solo en Manhattan). Allí los donuts no son como con los que sueño yo por las noches, pero hay unos de chocolate y bizcocho, se llama glassed chocolate, y el donut blanco de toda la vida que están buenos, también hay cookies gigantes de varios sabores, chocolate blanco, de pasas, de frutas, etc. Pedí una y no me la acabé, para que os hagais una idea. El café te lo dan de igual forma, pero por lo menos nos podiamos sentar 20 minutos a tomarlo.
Mi otra gran opción de desayuno:
- DUNKIN DONUTS. No tiene nada que ver con la apariencia del Dunkin de Madrid o Berlín que son más distinguidos. Aquí va toda la chusma, es un desayuno rápido y con muchas calorías. Y allí fui yo.
Me encantan, donuts buenos de verdad, de chocolate blanco, negro, de fresa, rellenos… en ese mismo local, situado en Broadway, está el Kentucky Fried Chicken y una hamburguesería rollo Mac. Mi marido, que es muy ecléctico, no dudó en comer donuts seguidos de una suculenta hamburguesa y un hot chocolate. No, no murió.
El Dunkin lo pisábamos también en la hora del postre, comúnmente llamada por mi, la hora del dolçet, o sea, a cualquier hora.
- Otra opción es desayunar lo que aquí almorzamos, es decir, bocata de jamón o pavo con mayonesa y lechuga, un rollito turco tipo vegetal… todo esto lo encontrareis en casi todos los rincones, café Europa, Pax, Starbucs, Café metro… todos ofrecen lo mismo.
- Y por último, el desayuno al que me tuve que ceñir yo los últimos días, después de los donuts, bocadillos, cafeses, cookies y demás. Es un vasito de plàstico ya preparado con yogur de diferentes sabores y cereales, muesli, etc. Un zumo de naranja y arreando.
COMIDA Y/O ALMUERZO
Hablemos ahora de las comidas. El primer día el guía nos recomendó hacer como los neoyorkinos, comer algo rápido al mediodía y no parar para no decaer. Y eso hicimos, patear Broadway con el mejor perrito que nos podíamos haber encontrado en Nueva York, lo reconozco, tuvimos suerte. Está por Wall street, en el downtown, justo donde està el toro que da comienzo a Broadway. Pan alargado, perrito, cebolla y Ketchup. Buenisimo!!!!! En dos bocados te lo comes y tuve que visitar en breve el dunkin, pero no estuvo mal.
Otro día comimos, recomendados por el guía también, en la pizzeria más antigua de nueva York, no me atrevo a decir de Estados Unidos, porque no lo recuerdo bien, y quiero ser honesta en mi relato. Se llama Lombardi’s, está en el cruce de la calle spring con la calle mott. Se supone que es Little Italy, pero como los chinos lo han invadido todo, hay mas orientales que italianos. En la pizzeria se hace cola, muchos turistas van, pero es un local grande, te puedes hacer algo en la barra y esperar. Solo sirven pizzas, ni pasta ni entrantes ni nada. Pizza, y por cierto la carta es bastante limitada, pero la historia, el entorno, y cómo no, las pizzas al horno de leña, te invitan a disfrutar del momento.
En central park hay mucha variedad para comer, hay una cafeteria-restaurante, en la que puedes coger la comida y llevártela o sentarte en la terracita. Yo ese día, tomé una ensalada de fruta, y Hugo unas patatas fritas y paseando nos lo comimos. Hay desde hamburguesas a entrecottes.
Otro dia comimos en un sitio llamado Pax, regentado por mexicanos, hay varios repartidos por la ciudad, pero este estaba en la 48 con Madison av. Allí tienen como unos bols de plástico transparentes con ensalada verde (lechuga, espinacas, canónigos…) tu la eliges y luego ellos la completan con los ingredientes que tu les dices, están todos expuestos delante, hay como 30 o 40 ingredientes diferentes, te lo mezclan todo y eliges el aliño. Es una comida sana, rápida y barata. Estaba lleno de ejecutivos que se lo llevan, nosotros comimos allí sentaditos como las personas normales.
Otra opción son las cadenas como el Sbarro.
Es un buffet, coges la bandeja y te sirves. Hay pasta, carne, pizzas, algo de ensalada y algún que otro guiso sospechoso. Lo malo de estos sitios, reflejo de la vida americana, es que es todo demasiado, no puedes tomar un platito de algo y ya está. Los macarrones van con 5 alitas barbacoa picantes. Los espaguetis con dos pelotas de puchero y salsa de tomate. Con un plato comen 2, y si son Eva y Vicent, 3.
Como no, comimos hamburguesa americana, pero no en el mac, en 2 sitios tipicos, un dia para comer y otro para cenar. Y así enlazo con lo que comiamos por la noche.
CENAS
La verdad es que ese momento si que nos lo tomábamos con más calma. Como acabo de decir una noche, ya de las del final, fuimos a una hamburguesería, Five Napkin, en la 9th. Que hamburguesota, que aros de cebolla, que patatas, que cerveza!!!! Dios mio!!!
Solo tengo que deciros que lo vomité todo al llegar al hotel. Pero estaba buenísimo.
En cuanto al resto de las cenas, las resumo.
- Recomiendo un thailandés que se llama yum yum, en la 9th. Había menú de noche, creo que 17 o 18 dolores, varios entrantes y un plato. Estuvo muy bien.
- Un italiano llamado pizzeria Niza. Unos spaghuettis bolognesa muy buenos, y raviolis con una salsa, que no es nata, muy buena. Los platos son abundantes, y el vino muy caro, 8 dólares 1 quartino, algo más de una copa que sirven en una mini botellita.
- También recomendamos un restaurante chino, pero no del estilo de los de aquí, sino elegante, y selecto. La comida muy buena, el sitio muy acogedor, poca luz, buen servicio, y lo que sobró nos lo pusieron to go, y nos lo llevamos al hotel. En la 9th.
- Y por último un italiano, cuyo dueño nos trató muy bien. La comida fresca y de calidad, aunque el más caro de todos los sitios que visitamos. Pero valió la pena, allí cené gnocchi de espinacas con salsa fresca de tomate y almendras. Y de postre la típica tarta de queso americana. En la 9th
Bien, yo creo que he contado lo más importante. Como los sitios que he citado, hay miles en Nueva York, pero lo importante es creer que uno está yendo a los más especiales. Gracias y hasta la próxima!!!
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elenatelleva
