Una escapada a Bocairent

Bocairent es uno de esos "pueblos con encanto" de la provincia de Valencia. Está en la montaña, cerca de Ontinyent. Si venís de Valencia por la autovía tenéis que salir en la salida de Ontinyent, Villena, Agullent; nosotros pensábamos que estaría indicado y nos pasamos...

Nos sorprendió ver que era un pueblo bastante turístico: la oficina de turismo estaba llena y todos los sitios a los que íbamos.
Buscando información sobre el pueblo, me he encontrado con una página donde se ofrece una ruta estupenda para hacer, mejor que la que yo os iba a proponer, entre otras cosas, porque cuando fuimos llovía y eso nos limitó un poco.
Este es el enlace: Ruta por Bocairent

Estas son imágenes de la ermita y de les covetes dels moros (aunque su origen es desconocido se atribuyen a la época árabe)





Las dos cosas están bastante cerca del pueblo, se puede dejar el coche y desde la misma oficina de turismo iniciar la ruta.
Les covetes nos impactaron, pero también nos gustó la cava, que está antes, donde guardaban el hielo, está reconstruida, no es original, pero te puedes hacer una idea de cómo era y para qué se utilizaba.



Y por supuesto para comer recomiendo el Restaurante Ca l'alegre: esta es su página web: http://www.calalegre.com
Lo encontramos de casualidad y fue un acierto. Comida creativa pero del terreno, todo con productos de la huerta valenciana, como nos explicó el dueño. El ambiente es más que agradable y no está mal de precio, unos 20 euros por persona. ¿Qué más se puede pedir?




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Por la noche en Denia

Estas son algunas propuestas para salir por la noche por Denia más allá de los típicos pubs y discotecas masificadas, un plan alternativo pero con la misma marcha:

DONDE IR POR LA NOCHE

Blues Bar enfrente de la escollera. Música en directo viernes y sábado.

Betibo: lounge Bar en la Crta. A Javea, 4

L’ Escollera: varios pubs y restaurantes dentro del puerto.

Hacienda: discoteca en el MOntgo. Preciosas vistas hacia Javea.

Trifasic: pub autóctono de la gente de Denia.

El Margerit: ídem que el anterior.

Salamandra: pub con música en directo y terraza en la plaza. Ambiente agradable para dejarse ver y que te vean.

Y si la noche se alarga estos son algunos hoteles con algún encanto especial donde poder quedarse:

HOTELES

La Racona Restaurante Jardín: Complejo formado por una casa madre y varios bungalos de inspiración levantina, emplazado frente a la playa rocosa de les rotes, uno de los tramos mas hermosos de la costa blanca.

Hotel La Posada del Mar Hotel frente al puerto ocupa un edificio del S. XIII a los pies del castillo de Denia y vistas al mar. La colección privada de artilugios marinos de los propietarios constituye la decoración de los espacios comunes.

Hotel el Raset: Sensacional decoración.

Hotel Daniya: Familiar pero al otro lado de la carretera. El Spa está bien para ser de un hotel, pero su precio es excesivo (20 euros por persona, un robo)

Hotel Rosa: Pequeño hotel abierto directamente al mar.

Los Angeles. Hotel familiar en primera linea de playa. Muy confortable y buen ambiente.

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Comer en Denia

Estas son algunas propuestas para comer en Denia. Hay tanta variedad que ha sido imposible reducir la selección, por restaurantes no será:

En la carretera de Les Marines

Octavios: restaurante con terraza mirador. Está bien.

L'Espigó: abierto en junio de 2005. Ofrece arroces, pescados y una divertidas entradas. El local se encuentra en los bajos de la urbanización Albatros y se abre con grandes ventanales a la playa y al jardín interior de la urbanización. La decoración es muy moderna.

Jamse: La fideuà está deliciosa y también el arroz a banda.

El Trasmall: Especializado en arroces caldoso.

Sorrento: Pizzería enfrente de Octavios. Delicioso en carpaccio.

Casa de l'Arròs: para disfrutar de todo tipo de arroces.

El Poblet: Referente mundial de cocina de autor. Todo sensacional. Premio nacional de gastronomía en 2006 y segunda estrella Michelín en 2007. Quique Dacosta se ha consagrado como uno de los mejores cocineros del momento. Exaltación de sabores que contrasta con la aparente sencillez de sus platos. Si se puede, vale la pena probar la gamba asada en roca untuosa de sal y pan de oro. La revista Food&Wine lo sitúa entre los 10 mejores del mundo.



Denia pueblo

La Barqueta: Rastaurante del Grupo Raset, si se puede cenar en la terraza mejor. A mediodía hay un menú que incluye algún arroz o fideuà que vale la pena. Sale por menos de 20 euros por persona.


El Asador del Puerto: plaza del raset, 10. Situado en la zona marinera. Sobresale por sus recetas de pescados y sus asados de cordero y cochinillo en horno de barro. Cocina clásica bien ejecutada.


Sal de mar: está situado dentro de el hotel el Raset. Al frente de este restaurante está Vicente Patiño, que fue Premio Revelación Fusión en el 2007. Ofrece cocina creativa de raíz mediterránea basada en la calidad de los productos locales.


Aitana: para cenar de pie en la barra con pescadito frito. En la calle Sandunga.


Casa Federico: en su origen fue un bar de almuerzos para los pescadores. Creció el turismo y se convirtió en restaurante. Esta en la calle Ausias March, 9. Recomendables los arroces y les coques de dacsa. Vale la pena reservar con antelación los fines de semana.


Gavilà: uno de los autóctonos estableccimientos resistentes de Denia. Está junto al puerto, de donde sales las barcas de pesca y los navíos a Ibiza. Era un baret de pescadores reconvertido después en restaurante familiar. Lo que ofrece: anguilas en all i pebre, raya frita, arroz caldoso con sepia y verduras y arroz a banda con escorpora.


Xokos: bar gallego, para cenar unas tapas detrás del hotel El Raset.


Pizzería L'Obrador: horno de leña para las pizzas y crepes. Es bastante económico. Está en la calle Sandunga, 6.


Pizzería Roma: está en la calle de la Mar. Las pizzas son exquisitas y al final de la velada suele haber sorpresa, amenizada por el simpático dueño. Un consejo: los vinos italianos que ofrece no suelen valer mucho.


La Seu: la nueva sensación en Denia. Cocina de paladar en la calle Loreto. El local está inundado de luz y goza de vistas privilegiadas al Montgó. El precio aproximado es de 85 euros.


Tasca Eulalia: La avda. Marques del Campo es la arteria urbana mas significativa de Denia, vía de comercios, bares y paseos ciudadanos. Desde 1982 congrega a los amantes del tapeo valenciano. Tapas: caracoles guisados, pulpo seco, pulpo con pencas o les coques de dacsa. Y también la pelota de puchero

El Raset: Bellavista, 7. Afamado local cuyas especialidades de perfil tradicional le hace crecer en clientela. Buenos arroces de caldero y sabrosos pescados guisados. Terraza animada.

Les Rotes

Pegoli. Una institución abierto en 1943. Situado frente a la playa de les rotes., es uno de los restaurantes con mas solera de Denia. Probar: el pescado de lonja, la gamba de Denia y el arroz a banda


Trampoli: para comer gamba de Denia


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Qué hacer en Denia

Denia es una ciudad en la que te sientes libre: libre para pasear, ir de compras o estar en la playa. Cualquier momento es bueno para ir porque las temperaturas son agradables todo el año, además tiene fiestas durnate casi todo el año: fallas en marzo, bous a la mar en julio, moros y cristianos en agosto. Los fines de semana cierran la avenida Marqués de Campo, por lo que resulta agradable pasear por ella.



No todo es playa es Denia, se pueden hacer muchas más cosas, como subir al Castillo de Denia y visitar el Museo Arqueológico en su interior. Si no tienes muchas ganas de andar hay un tren turístico que sube desde enfrente de la Tourist Info.
Pasarse por el Museo del Juguete en el Centro Cultural l'Estació.
Dar un paseo por los barrios antiguos: Baix la Mar y les Roques.
Seguir alguna ruta de senderismo por el Montgó.
Disfrutar de la Denia Marinera: el puerto, la lonja, la plaza Drassanes, las casitas antiguas de pescadores: calles Bitibau, Plaza San Antonio, Sandunga, Plaza Mariana Pineda...
Ir de tiendas por la calle Marqués del Campo y cualquiera de las calles que dan a ella (c/ Temple de Sant Telm, Mar, Colon, Pare Pere), subir hasta la Glorieta y por la c/ Cop hasta la Plaza del Consell, desde donde se puede subir al Castillo.
Descansar en Les Rotes, en cualquiera de sus zonas, pasear por el Paseo de les Rotes y luego subir al Cabo de la Nao.



ALREDEDORES
Y si se coge el coche en poco tiempo se puede llegar a muchos sitios de interés: Vall de la Gallinera, Benissiva, Beniali, Alpatro... Y los más famosos: Altea, Moraira, Calpe...




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Dormir y comer en Sintra

Hotel Pestana Sintra Golf (****), os recomiendo este hotel no sólo por ser en el que estuvimos nosotros, sino porque es el mejor calidad precio de la zona y sus características lo hacen perfecto para no romper el encanto y fantasía de la espectacular Villa de Sintra.

Mato Da Mina, 19

Sintra

Tel: +351210424300

Email:pestana.sintra@pestana.com

Restaurantes buenos, bonitos y baratos:

Cantinho de Sao Pedro

Plaza don fernando 18

San Pedro de Sintra

Tacho real

Dus da ferraira 4

En ello podrás degustar auténtica comida Portuguesa con un precio medio de 20 euros.

Bon profit!!

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Alrededores de Sintra

El Convento Dos Capuchos, también llamado Convento del Corcho, de las cosas que más me impactaron de este viaje y que guardé en un rincón especial de mi corazón; se halla oculto “literalmente” en el corazón de la Sierra de Sintra (o monte de la Luna).de hecho te topas de repente con su entrada la cual se distingue hoy en día por la puerta de madera que han colocado si no, te pasaría desapercibido, pues está excavado en plena roca todo él



Felipe II llegó a afirmar que en sus reinos (España y Portugal) tenía los 2 extremos del culto católico: por un lado el exuberante Escorial que casi todos conocemos ya y por otro, este Convento, exponente máximo de la pobreza, con sus minúsculas celdas excavadas a mano en la roca y revestidas de corcho para que los monjes de entonces se protegieran de la humedad. Aunque os digo que en pleno verano y la humedad dentro, era más que notable. Eso sí continuamente vas encorvado pues la altura de sus techos es mínima, lo cual te hace ver el grado de sacrificio de esta gente. Los alrededores del Convento permiten un agradable paseo entre el frondoso bosque así como ver hermosas fuentes y saltos de agua lo cual contrasta con el ambiente de sencillez del convento. Y lo mejor de todo es que estuvimos totalmente solos, es un verdadero Paraíso



El Cabo Da Roca menudas vistas del mar que ofrece!! Esta es una visita que tienes que hacer si quieres pisar el punto más occidental de Europa , (la nariz de nuestra Península Iberica). Es un majestuosos cabo de granito, donde el mar rompe con fuerza como anunciando el fin del mundo. Si lo que buscas es un buen baño, en este punto ni se te ocurra, pues el increíble viento te haría desaparecer.





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Sintra

Sintra es considerada la villa más hermosa de Portugal, y, doy fe de ello...
Os aseguro que es un lugar privilegiado, donde se mezcla la belleza de la naturaleza rodeada de palacios, conventos y casas aristocráticas que crean un entorno de ensueño mágico y muy romántico; durante mis días allí parecía que nada malo nos pudiese ocurrir. Por cierto, en 1995 la UNESCO declaró Sintra patrimonio de la Humanidad, así que te recomiendo que amortices el cachito que te pertenece cuanto antes.
Sus fabulosos y coquetos jardines te invitan a aparcar el coche en el centro y a dejarse llevar por sus laberintos, pero toda Sintra es un lujo para tus 5 sentidos.

Lo que se conoce como Sintra es realmente la unión de 3 pueblos pegados entre ellos: Sintra-Villa, Estefanía y San Pedro de Sintra aunque cuando caminas por ellos no podrías adivinar donde empieza uno donde y termina el otro. Os recomiendo recorrerlos a pie no sólo para ver, también para poder oler y sentir todos sus rincones

Un agradable paseo hasta el Palacio de Seteais

Empezaremos la excursión desde Sintra-Villa, concretamente en Plaza de la República donde es imprescindible la visita al Palacio Nacional. Callejeando por la pequeña población surgirán muy agradables sorpresas. Luego la excursión continúa por el Castelo Dos Mouros, el Parque y Palacio Da Pena, hasta llegar a Seteais. Por supuesto se puede hacer en coche pero yo creo que es muchísimo más agradable hacerlo a pie. Se debe tomar la CalÇada dos Clerigos y dejara a tu izquierda la Iglesia Santa Maria, para dirigirnos al Castelo Dos Mouros. Nada supera las privilegiadas vistas y hermosos edificios de cuento de hadas. Podremos acceder al laberíntico y fascinante Parque Da Pena con 2000 especies vegetales y un rosario de fuentes, ruinas con encanto.




Tras un paseo de 20 minutos se encuentra el Palacio da Pena que fue construido en el siglo XIX como casa de verano de la familia real de entonces. Es una be-lle-za, con una increíble mezcla de colores y de estilos tanto por fuera como por dentro. Los muebles de los suntuosos salones parecían que se acababan de usar el día anterior. Es posible bajar a pie desde Da Pena, por un sendero hasta el Palacio de Seteais. Me daba la impresión que en cualquier momento aparecería Cenicienta a lomos de su caballo guiado por su príncipe azul...una pasada!





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MALTA: Gozo y Comino

GOZO!!!!!



Todos los días, cada hora (incluso por la noche) parten Ferrys desde Malta a la isla de Gozo.
Esta isla os encantará desde el principio. No os perdáis su capital, Victoria (Rabat) ni su Ciudadela.
Tampoco su coqueto puerto, donde podéis cenar antes de coger de nuevo el barco. ES en este puerto donde se encuentran los mejores restaurantes, que por cierto aún son más económicos que en la isla de Malta. Incluso sumando los 10 euros que cuesta el ferry te sale más barato cenar aquí.

No os vayáis sin hacer una visita rápida a Dwejra para ver La ventana azul, donde la naturaleza te da una lección de fuerza y belleza.



Y para pasar la tarde hazte un favor y dirrigios a Ta' Cenc Cliffs, donde se puede ver la puesta de sol y observar como sus acantilados salvajes se hunden a plomo en el mar. Allí encontrarás la pequeña y escondida cala donde como máximo verás a cuatro autóctonos más y ningún "guiri".
Ésta sí tiene chiringuito, tipo chillout pero sin grandes lujos, lo que la hace encantadora.



NI SE TE OCURRA IRTE DE MALTA SIN VISITAR COMINO...

Y como se suele decir, lo mejor para el final: es el caso de Comino, llamada así por esta especie que allí abunda. Se llega con yates-autobús que también parten cada hora diariamente pero hasta las 23h de la noche. No se puede llevar el coche pues allí no hay carreteras. Es muy pequeña, el único habitante de la isla es el único policía de la isla... y los montones de turistas que acuden, porque su belleza la convierte eb el principal destino turístico de Malta; pero no temáis, aun así no hay ni la cuarta parte de gente que te puedes encontrar en la Malvarrosa, tampoco cabrían...
No hay palabras para describir el Blue Lagoon, la transparencia de sus aguas. Y como una imagen vale más que mil palabras, aquí os dejo el broche de oro.




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Qué comer en Malta

• El pescado: siempre freco y de una gran variedad y tipos. En la mayoría de restaurantes tienen la costumbre de especiarlo todo, incluido el pescado por lo que puede matar su sabor.
• El Fenek o conejo: lo preparan de forma mmmmmmmmm magristral
• El Gbejniet o queso, típico de Gozo, que está de muerte... pero eso sí, es fuerte y picante!!
• El licor Bajtra, hecho con los higos chumbos que abundan en la isla, está buenísimo!! Ideal para largas siestas bajo la sombrilla.

Para una cena tranquila y romántica id a Il Veccja Restaurant & Wine Bar en Sant Paul's Bay (Triq San Pawl 372). Se cena en la agradable y rústica terraza con vistas al coqueto puerto invadido de barquitas mientras se pone el sol. Eso en Valencia se pagaría a precio de oro y encima la cena está buenísima y es abundante.

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Berlín en cuatro pasos

PRIMER PASO: Los museos en su isla.



Empiezo con los museos, aunque para los que vayan pocos días a Berlín me imagino que no serán una prioridad. La Museum Insel (Isla de los Museos) se llama así porque éstos están rodeados por el río Spree por ambos lados, y situados, ppor tanto en una especie de isla en medio del río.
El que más vale la pena es el Pergammon Museum, donde se trasladaron piedra a piedra las escalinatas de entrada al Templo de Pérgamos. También están allí dentro las Puertas de Ishtar de la mítica Babilonia y la puerta del mercado de Mileto. El resto del museo está dedicado a Grecia, Roma y el Islam, que si se han visto otros museos de este tipo (como el Louvre o el British Museum) pues no dice mucho, pero sólo por ver lo anterior, ya digo que vale la pena.

El otro museo importante es el Altes Museum (desde donde está tomada la foto). Está dedicado al arte egipcio y lo más importante que tienen es el busto de Nefertiti. Si en el anterior valía la pena pagar la entrada, en este si coincide que estáis en la ciudad jueves, podéis entrar gratis a partir de las 6 de la tarde (todos los museos son gratis los jueves a partir de las 6, no sólo este).

El resto de museos que componen esta "Isla de los museos" son el Neues Museum (en obras), la Alte-Nationalgalerie y el Bode-Museum. Estos últimos no los visité, en ellos hay pinturas y esculturas de épocas posteriores. En la parte de atrás del Bode-Museum hacen conciertos al aire libre de música clásica, por lo menos en verano. Creo que aquí los hacían el sábado. El jueves también hay conciertos al aire libre en el parque que se encuentra delante del Altes Museum, delante de la Catedral de Berlín (de nuevo es la que sale en la foto).

SEGUNDO PASO: Unten del Linden



Unten den Linden (que significa "bajo los tilos") es una larga avenida que empieza una vez cruzas el puente de la isla de los museos y termina en las puertas de Brandemburgo. Lo que se puede ver en el recorrido es lo siguiente: el Museo de Historia Alemana y en frente la Ópera. Más adelante la Biblioteca y el Guggenheim alemán, que nada tiene que ver con el bilbaíno porque pasa casi desapercibido, es un edificio histórico. En lado opuesto está el Café Einstein, uno de los más turísticos de la ciudad, donde sentarse a ver pasar la gente, cuando hace bueno, claro. Y ya al final, antes de llegar a la Parisier Platz, donde se ubican la Puerta de Brandemburgo, encontramos el Hotel Adlon. Referencias culturales de este hotel: donde Viki Baum situó su novela Grand Hotel, la de la película de Greta Garbo. Es donde se hospedan todos los famosos cuando van, como Michael Jackson, que desde uno habitación de este hotell enseñó al segundo de sus hijos. Esto lo leí en una guía, yo os informo de las curiosidades.
¡Ah! En esta calle hay muchas tiendas de souvenirs con todo tipo de trastos, muchos de ellos con el dibujo de un oso, símbolo de la ciudad.
Para acabar con esta larga avenida, he de decir que una de las calles que la cruzan perpendicularmente es Friederichstrasse y esta calle vale la pena recorrerla. Hacia el principio saliendo de Unten den Linden está la Gendarmenmarkt Platz, muy bonita, con la llamada catedral francesa a un lado y la catedral alemana al otro. Continuamos adelante y están las Galerias Lafayette, con todos los productos de lujo que os podáis imaginar, entrad porque es muy original por dentro. Y por fin, si seguís caminando os encontraréis con el Charly Check Point, que marca la línea de división entre el berlín ruso y el americano. Hay una reproducción de la caseta de control y unos paneles explicatorios de la historia del muro. En el museo se pueden ver objetos que recuerdan la relación de las dos Alemanias con el muro, no es un museo imprescindible, pero resulta entretenido.

TERCER PASO: Reichtag y Tiergarten



En cuanto cruzas por debajo de las puertas de Brandemburgo ya estás en el Tiergarten. Es un parque immenso, que se sitúa en el corazón de Berlín. Y justo lo primero que se ve a mano derecha es el Reichtag, el Parlamento alemán. La cola que se ve en la foto es sólo el principio de la que había: una hora y media para entrar, y dicen que siempre es igual. Lo positivo: no se paga y es interesante subir a la cúpula que diseñó Norman Foster. Desde arriba se ve toda la ciudad y es impresionante, pero ¡una hora y media de cola!
Después de tanto plantón, a nosotros no nos quedaron muchas ganas para perdernos por el parque, pero no nos importó porque dimos una vuelta con el autobús 100 que hace el mismo recorrido practicamente que el bus turístico. Está bien cogerlo el primer día y te haces una idea de toda la ciudad.
Volviendo a las puertas de Brandemburgo a la izquierda esta vez se encuentra el famoso monumento al Holocausto. La verdad es que llama mucho la atención su aspecto de cementerio enorme y simétrico, da que pensar.
Si se sigue por esta calle, creo que es la Ebertstrasse, y caminando un buen rato, se llega a la Postdamer Platz, donde está el museo del cine dentro del edificio Sony, en su vanguardista plaza interior. Aquí cerquita se puede comer, pero eso lo pondré en otro post.

CUARTO PASO: Alexander Platz



Yo tenía el hotel en esta plaza y me encantó ver lo animada que estaba a cualquier hora del día y de la noche. También es el escenario de libros y películas, es una plaza enorme que aun recuerda a la Alemania oriental en los edificios que la rodean. Cerca de allí está la torre de la televisión, a la que se puede subir (creo que vale unos 11 euros) y tomar algo en el restaurante que hay arriba, que al parecer no es muy caro, pero no lo probé. Y también por aquí esta el Nikolas Viertel (barrio de San Nicolás), que parece sacado de cualquier barrio parisino: cafés, tiendecitas, el río a un lado, la iglesia al otro. Muy recomendable darse una vueltecita por aquí. De vuelta a Alexander Platz, tomamos el lado contrario y podemos llegar al Hackesher Markt (las distancias son tremendas aunque en el plano parezca al lado). Se trata de un edificio con galerias (patios) conectados entre sí, con bares, tiendas... y muchas historia, puesto que aquí se escondeiron muchos judíos durante la época anterior a la Segunda Guerra Mundial.



Y además de todo esto hay que ir a la East Side Gallery, el trozo de muro más largo que se conserva, aunque solo sea para hacerse la foto.
Y a la iglesia del Kaiser Guillermo, que se ha mantenido semiderruida como testimonio de la guerra. Y cerca de aquí el zoo, y numerosas tiendas, incluidos los Grandes Almacenes KDW.
Y Kreuzberg, el barrio turco, que a mí no me gustó especialmente.
Y Prenzlauer, el barrio obrero que está de moda entre el mundillo artístico por lo que decían porque yo no puede visitar, pero sí que pude ver todo lo demás, y me quedé con la sensación de que Berlín no debía ser una mala ciudad para vivir, pese a todo.


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